La finca es un lugar lleno de naturaleza y magia, muy silencioso, tiene restaurantes cerca, y también está muy cerca de aguas termales.La cabaña cuenta con todas las comodidades, es realmente acogedora y tiene unos detalles de decoración en cada rincón que inspira y te hace sentir como en casa. Anfitrión maravilloso! Siempre atento y sus mascotas bellísimas que divierten y acompañan.
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Fue una muy buen experiencia. El lugar muy lindo, práctico y limpio. Tiene la experiencia de los petroglifos y termales muy cerca. Hay varios perros lindos que visitan la casa. Felipe muy atento de responder mensajes rápidamente y de dar instrucciones puntuales. La cocina tenía café y cosas para preparar al llegar, qué buen toque. Volvería totalmente.
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El alojamiento era tal y como lo esperábamos, muy tranquilo, perfecto para descansar y en la naturaleza, tiene unos perritos muy lindos y amigables, la atención muy buena y los anfitriones muy amables y atentos, si volveríamos sin duda, y recomiendo mucho el lugar y sobre todo la comida, uno de los hermanos es chef y cocina muy rico, la pizza es fantástica y las bandejas deliciosas. Muchas gracias por acogernos.
Una experiencia unica, unos paisajes muy hermosos, las cabañas muy cómodas, acogedoras y limpias; además de contar con todo lo necesario para una buena estadia; el servicio fue igual de excelente, la persona encargada muy amable y atenta; la comida estuvo deliciosa además de ser porciones muy grandes; y como plus tienen perritos que te acompañan durante tu estancia y son muy cariñosos.
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Nos encantó el lugar! Estábamos buscando un lugar para desconectarnos y la cabaña fue perfecta! De ida nos perdimos horrible por culpa mía 😅 y ellos dos nos fueron a buscar nos ayudaron a empujar el carro en medio de la noche y en medio de la nada. Tienen una energía súper lindaaaaaa de vdd que quedamos muy agradecidos. Súper recomendado el lugar.
Me encanta este lugar, es bonito, sostenible, amigable con el ambiente, tranquilo, tiene todo lo que uno necesita, sea que quiera cocinar o comer allá. Los anfitriones son muy amables y atienden lo que uno necesite, los peludos que viven allá son otros anfitriones maravillosos. Cerca hay una quebrada y termales a los que se puede ir caminando.
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