Simplemente impresentable
El 8 de febrero me puse en contacto con Pesquer para pedir en presupuesto de una barandilla y un pasamanos con unas medidas concretas. Lo recibí un mes después y lo acepté (lógicamente descarté otros presupuestos solicitados a otros profesionales).
Para acabar de elegir los acabados me desplacé a principios de junio hasta la fábrica de Barbastro, reuniéndonos con el responsable -que no nos puso ningún problema-. Yo hice hincapié en que necesitaba unas medidas concretas.
El 8 de julio llamé por teléfono, para ver cómo iba mi entrega y se me informó de que no encontraban mi pedido. Unos días después recibí un whatsapp diciendo que la persona que limpia había tirado mi pedido y que si quería algo lo pidiera a través de su web.
No quiero aburrir con más detalles, y los problemas que me supone la poca profesionalidad de esta empresa.
Es vergonzoso y como encabezo mi correo: impresentable